Roxana Canné y Ezequiel Iglesias son los directores de
“La Fusa”, un taller destinado al aprendizaje de la música desde distintos
abordajes. Funcionando en nuestra ciudad desde 2011, el taller se perfila como
un renovador espacio de expresión.
“La
Fusa”, Taller integral de música, funciona en nuestra ciudad desde el pasado
año, cuando Roxana Canné y Ezequiel Iglesias, comenzaron a darle forma a un
proyecto personal: generar un espacio propio para la enseñanza de la música.
Roxana es cantante, actriz y docente. Ezequiel es músico –integrante del grupo
Mamá Bora- y docente. Ambos con un peculiar talento, se embarcan en la tarea de
hacer crecer en nuestra ciudad a “La Fusa”.
Porqué
Mercedes para llevar adelante el proyecto, preguntamos, “en primer lugar tomamos la iniciativa porque Mercedes es la
ciudad de mi infancia y porque nos proyectamos formando nuestra familia con un
ritmo de vida diferente al de la Capital, por lo que fue la opción
indiscutible. Debo admitir que nos acompañó la incertidumbre porque la decisión
significaba dejar nuestro trabajo como docentes en Buenos Aires por un proyecto
que no teníamos idea de la respuesta que pudiera tener. Hoy sabemos que nuestro
trabajo es bien recibido y que la propuesta funciona”, contesta Ezequiel, a lo
que Roxana agrega: “Por otro lado sabíamos que la idea de traer este formato de
enseñanza a la Ciudad era algo nuevo, en ese momento sabíamos que había varios
profes de instrumento que dictaban clases particulares y que la Ciudad contaba
con su propio Conservatorio, un lujo que no todas las ciudades pueden tener.
Por eso la idea fue y sigue siendo sumar una propuesta diferente a las ya
existentes, aportar otro granito de arena en materia de enseñanza musical”. Ambos,
Roxana y Ezequiel, trabajaron en diferentes escuelas musicales con mucha
trayectoria en la ciudad de Buenos Aires -Colegio de la Ciudad, Tademus, El
Centro, Musineira, entre otras- lo que les permitió desarrollar y aprender
el método y la línea pedagógica que hoy utilizan.
Antes
de embarcarse en el proyecto, hoy una realidad en crecimiento -“La Fusa”-,
recién llegados a la ciudad, comenzaron a trabajar con talleres itinerantes, “actividad
que hoy seguimos desarrollando. Fue así que comenzamos a recorrer diferentes
escuelas de la ciudad ofreciendo un taller extracurricular de ensamble. El
taller consiste en enseñar música a través del formato de banda, la idea es que
sin conocimientos previos los chicos (y también adultos), puedan tocar en una
formación de banda standar (guitarra, batería, bajo, piano, percusión y voz),
trabajando repertorio y rotando los instrumentos. Al mismo tiempo también
creamos un ciclo de música popular que realizamos durante el año en el Hotel
Mercedes”, cuenta Roxana. “’El Cielo en la Raíz’ fue otra hermosa experiencia –agrega
Eze-, la idea fue acercar a la Ciudad a diferentes figuras de nuestra música
popular con un valor de entrada menor al que se paga en capital. Así fue que
convocamos a diferentes colegas con los que hemos compartido escenario y nos
pusimos en manos a la obra. Daniel Maza, Ricardo Panissa, María Volonté,
Marcela Passadore, Agustín Pereyra Lucena, Eduardo Angel Valle, un lujaso de
músicos realmente”.
En
cuanto a las metas para este año, Roxana y Ezequiel son optimistas, teniendo en
cuenta la convocatoria lograda en 2011, y van por mas, “nuestro objetivo
principal es que La Fusa no funcione sólo como una entidad ligada a un espacio
edilicio solamente. Queremos poder expandir la actividad musical a toda la
Ciudad, recién estamos empezando a construir el espacio, que requiere de
ciertas estructuras para sustentarse. La idea principal es que la enseñanza
musical sea posible para todos y con un enfoque actual, es parte del proyecto
poder llegar a aquellos que no pueden abordar una cuota mensual. Nuestra
premisa es formar la conciencia de que la música es un camino para generar un
espacio propio, de reconocimiento y crecimiento. Un espacio que requiere de
cuidado y respeto. La música trabaja en espejo con nuestras cualidades e
impedimentos, nos hace saber que nunca hay límites para el aprendizaje ni para
la creación, creo que es un arte que tiene muchos sinónimos, pero uno de los
que más me convoca es libertad”.
Integran
“La Fusa” 9 profesores, quienes en su mayoría ejercen como docentes y músicos
en diferentes espacios de la Capital, cada uno especializado en cada área.
Más
de cien alumnos culminaron el ciclo 2011, “creemos que este año nuestra familia
será mucho más grande, hay muchos nuevos isncriptos”. Hoy “La Fusa” cuenta con
4 salas equipadas para las actividades actividades ofrece el taller:
Instrumentación (Guitarra, Batería, Bajo, Canto, Piano, Saxo, Flauta Traversa,
Acordeón, Percusión) - Canto: Entrenamiento vocal para el canto y la voz
hablada. (Rabine-método funcional de la Voz). - Ensamble: Actividad grupal en
formato de banda musical formada por cualquiera de los instrumentos que se
enseñan en el taller. Es para todas las edades y niveles. Se puede empezar de
cero con un grupo armado en el taller o banda propia para pulir diferentes
aspectos del grupo a través de la dirección musical a cargo de uno de los
profesores de La Fusa. Audioperceptiva: actividad grupal incluida en todos los
talleres antes descriptos. Entrenamiento auditivo y armonía moderna. (Método
Berklee) - Comedia Musical: Danza, Canto e interpretación aplicadas a la
música. Iniciación Musical para niños: de 4 a 6 años, actividad orientada al
desarrollo cognitivo y psicomotriz a través de la música.
Dentro
de “La Fusa” se respira música, ya se escuchan acordes y voces de una
incipiente actividad. Adultos y niños comienzan el ciclo 2012 cada uno en su
disciplina, se cruzan, se mezclan, se ensamblan. Los une el deseo de encontrar
en ese espacio, una forma particular y personal de expresión. Define Ezequiel:
“La música trabaja en espejo con nuestras cualidades e impedimentos, nos hace
saber que nunca hay límites para el aprendizaje ni para la creación, creo que es
un arte que tiene muchos sinónimos, pero uno de los que más me convoca es
libertad”.
Por
informes: TE 42-8146 – lafusataller@hotmail.com
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