Las historias del
maestro que enseñó y dirigió escuelas de la zona rural en los años 50, 60 y 70,
y que en los ‘80 presidió el Consejo Escolar, se presentaron a través del
análisis de la profesora Mónica Tirone y de las voces de Lelé Falabella de Fal
y Beatriz Latorraca de Spina.
El libro de Roberto Otermín, “De un Maestro
Rural” fue presentado finalmente ante el pequeño público que se nucleó en el
Museo de Arte. La responsable de presentar el libro que Otermín publicó por
primera hace más de una década, fue la profesora Mónica Tirone.
La docente de Literatura estuvo acompañada de
otras docentes – Lelé Falabella de Fal y Beatriz Latorraca de Spina que leyeron
textos del escritor, ex concejal, ex consejero escolar y, por sobre todo,
maestro y director en escuelas rurales.
Alrededor de un brasero y una olla de hierro
que simulaba un fogón, los presentes escucharon atentamente los textos y la
explicación que la profesora Tirone brindó. El inicio del encuentro fue con el
poema “Vuelvo a Ti”, leído por una de las integrantes de la Sociedad de
Poetas y Escritores “Ismael Marcelo Siri”, para después darle la palabra a la
actriz que leyó “Visitas de Primavera”.
En un análisis pormenorizado de
los capítulos y textos reunidos en “De un Maestro Rural”, la profesora Tirone
explicó que el libro tenía un lado autobiográfico y otro lado en el que puede
observarse el espíritu y el estilo del libro. “Es importante la cantidad de
imágenes sensoriales, comparaciones, metáforas, con las que se refiere al mundo
del cual está hablando”, destacó la profesora.
Asimismo, marcó la división
propia del libro que por un lado tiene las historias del maestro, pero por el
otro, las “estampas” en donde describe la vida rural y las profesiones de quienes
viven en esa zona. “En la primera parte, Coca Mañas le escribe una carta a
Otermín en donde le destaca la descripción pura de un niño. ‘Sabe rescatar lo
limpio del ser humano diciendo su íntima verdad’… En ‘Estampas Rurales’ Nilza
Benedetti le escribe que el hombre y la naturaleza se amalgaman con un lenguaje
sin artificios, con una prosas segura y con una sensación visual”, resaltó
Tirone que continuó con su análisis y lecturas de fragmentos.
En el cierre, Susana Otermín,
hija del escritor, que leyó un mensaje de su padre, destinadas al público
presente. Palabras muy emotivas pudieron oírse acerca de su experiencia como
maestro de escuelas rurales, la cotidianidad y encanto de aquel ámbito de vida
sencilla y amena, guiadas por una vocación poética y el respeto a las formas
más hermosas de la enseñanza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario